viernes, 28 de marzo de 2014

UNIDAD II.- EL DISCURSO (PRESENTACIÓN ORAL)

1. DEFINICIÓN
Desde el enfoque comunicacional, una presentación oral es un discurso: enunciados con información e intención (cadena de actos de habla).

1.1  Tipos de presentación oral

Expositiva: discurso para dar a conocer y explicar algún conocimiento. Su objetivo: informar sobre un asunto de forma general o particular.

Argumentativa: trata de causas y consecuencias. La argumentación es una variedad discursiva con la cual se pretende defender una opinión y persuadir de ella a un receptor mediante pruebas y razonamientos. Es la tesis (razones) en la que se sostiene la veracidad de alguna información. Su objetivo: convencer al destinatario para que adopte un determinado punto de vista o realice cierta acción.

2. ETAPAS DE LA PRESENTACIÓN ORAL

2.1 PLANIFICACIÓN

Selección de tema: Existe una infinidad de temas. Según su amplitud, algunos requieren ser tratados en alguna de sus partes específicas. Difícilmente, por no decir imposible, se puede abarcar la totalidad de un tema en una presentación.
Para efectos académicos, el tema debe ser atractivo al público (actual, controversial), debe ser trascendente (dejar algún aporte cultural), debe estimular a la reflexión y a la crítica.

Investigación y selección de material: Es necesario tener dominio del tema (documentarse más de lo que se va a exponer). Por ende, debemos cerciorarnos de que lo investigado provenga de fuentes fiables y susceptibles de comprobación. Lo recopilado debe ser interesante: valioso para el conocimiento. A mayor dominio menor nerviosismo.

Organización de aspectos a ser expuestos: Es necesario establecer las partes que compondrán la presentación oral: introducción, objetivos, contenido, desarrollo inductivo o deductivo (ser directo y concreto en cada aspecto tratado), conclusiones y conversatorio. Cada aspecto desarrollado debe dirigirse al alcance de los objetivos propuestos.
En el desarrollo debe tomarse en cuenta el tiempo de duración de los puntos tratados:
Corta duración: conceptos, tipos, clasificaciones
Mediana o larga duración: causas-efectos, aportes, ventajas y desventajas, proyecciones y problemáticas.
Preparación de apoyos audiovisuales: Los apoyos audiovisuales son numerosísimos. Cada quien debe seleccionar uno o pocos de estos. Algunas exposiciones ameritan un tipo determinado de apoyo (por ejemplo, una dramatización). Para atrapar el interés del público, algunas exposiciones requieren imágenes impactantes o audios antes de iniciar el desarrollo. Otras, sin embargo, pueden dejar para el final las imágenes más impactantes a fin de dejar en el espectador una impresión más duradera.
Tipos de apoyos: mapas mentales, mapas conceptuales, rotafolio, esquema, videos musicales, dramatizaciones, cuadro estadístico.

Ensayo: permite localizar y corregir problemas. Es ideal para la administración del tempo (verificar el tiempo de duración): Elaborar guión y practicar frente a un público (familiares o amigos).

TIPICOS PROBLEMAS DURANTE LA PLANIFICACIÓN
Subestimación del reto y abordaje simplista del tema.
Investigación tardía y superficial. Desorganización.
Deficiente recopilación de imágenes y documentos.
Poco esmero en la elaboración de ayudas audiovisuales (incluye errores ortográficos)
Poco o ningún ensayo (descontrol del tiempo y del orden de la presentación)

2.2 EJECUCIÓN

Una presentación oral debe concebirse como un espectáculo. Los puntos serán tratados en forma ordenada, clara y sencilla. Hay que tratar de mantener al público interesado.

CONTENIDO DE LA PRESENTACION ORAL (Parcial)

CARÁTULA

Debe incluir la Identificación de los miembros del grupo y demás datos del encabezado (logo y nombre de la institución que promueve la exposición).

Título de la presentación: debe ser atractivo, debe despertar la curiosidad y el interés por parte del público que verá la exposición. Se recomienda que el título se encuentre visible a lo largo de toda la presentación.

INTRODUCCIÓN
Brevemente, se hará mención del tema seleccionado y del ámbito que se pretende abarcar. Con ella, debe despertarse la motivación del público por adquirir nuevos conocimientos.
Como pudieron percatarse (imagino), todos los temas propuestos son muy amplios. Sería imposible poder abarcarlos en su totalidad en una exposición de 15 min. Se recomienda enfocarse en algún aspecto específico del tema.

OBJETIVOS / CONTENIDO
Pueden ser uno o dos objetivos (no deberían ser más). Estos deben dejar claro cuál es el propósito de la exposición. El público debe saber qué pretenden los expositores (cuál es su interés) para realizar la presentación. Es recomendable recalcar los objetivos al menos una vez durante el desarrollo de la exposición.
Señalar el contenido: conceptos a los que se referirán, los desgloses que se harán y los aspectos valiosos que justifican la presentación.

DESARROLLO

Deberá dividirse necesariamente en dos fases:
1)    Se especifica el área de conocimiento, y se dan los conceptos e ideas básicas que permitan al público adentrarse en el tema. Esta es una fase eminentemente referencial y explicativa.
En esta fase también se hacen desgloses del tema tratado: características, enumeraciones de problemas, conformaciones, procedimientos, tipos, etapas evolutivas, entre otros. La idea de esta etapa es profundizar en los aspectos que le permitirá al público comprender el por qué se expone el tema.
Se pueden reforzar con breves ejemplos, mapas conceptuales, imágenes flash, dramatizaciones y hasta chistes. Se recomienda el uso de esquemas, rotafolios, entre otros. Es una fase de corta duración.
2)    Esta es la fase más importante. En esta se explican las razones que hacen valiosa la temática expuesta: aportes, importancia, aspectos positivos y negativos, causas y consecuencias, propuestas o proyecciones futuras. También puede complementarse (a manera de comprobar lo antes dicho) con el uso de dramatizaciones, videos, música, imágenes flash, entre otros. Fase de mediana o larga duración.
En cada fase, un tema pudiera ameritar tratar una o varias (no todas) de las estrategias sugeridas. En el desarrollo hay que plantear argumentos sólidos y deben evitarse las repeticiones y la monotonía.

CONCLUSIONES
En esta parte debería verificarse el alcance de los objetivos. Es recomendable que se presenten distintas posturas críticas (no deben ser precisamente concordantes).
El final de toda exposición suele dejar en el público: nuevas convicciones, cosas que reflexionar, inquietudes por ahondar en el tema, interrogantes y hasta dudas.

TÍPICOS PROBLEMAS DURANTE LA EJECUCIÓN
Inseguridad, desconcentración, nerviosismo descontrolado.
Posturas inadecuadas: rigidez, balanceo, impaciencia, ligereza, decaimiento.
Bloqueo mental, uso de muletillas. Improvisación o desorden.
Voz chillona o muy baja, mirada perdida al infinito o únicamente dirigida hacia las ayudas audiovisuales.
Lectura de “chuletas” o de las ayudas audiovisuales.
Deficiente calidad o insuficiente cantidad de ayudas audiovisuales

2.3 COLOQUIO O PLENARIO (conversatorio)

En toda presentación debe darse al menos un breve intercambio de comentarios entre el expositor y el público. El coloquio debe enriquecer algún aspecto estrechamente relacionado con lo presentado.
El expositor debe ser receptivo y positivo, dispuesto a la argumentación y flexible a las posiciones contrarias. Hará aclaratorias con razonamientos sólidos y convincentes (un argumento débil no convence, más bien hace poner en duda la legitimidad del discurso). No debe caer en diálogos o confrontaciones, solo dejará sentada su postura.
El destinatario debe hacer preguntas inteligentes, dirigidas a aclarar ciertos aspectos aún confusos. Procurará mantenerse en el nivel de profundidad de la presentación. Debe hacer preferiblemente críticas constructivas, de fondo; no limitarse a la crítica superficial, de forma.
TÍPICOS PROBLEMAS
Reacciones negativas hacia el público: violencia verbal, desprecio, revirones de ojos, burlas y amenazas.
Diálogos y polémicas malintencionadas.
Se hacen preguntas impertinentes o insustanciales, así como críticas destructivas.
Adulaciones o cumplidos poco sinceros

3. RECOMENDACIONES

Mostrar una actitud extrovertida y respetuosa, que proyecte seguridad, convicción, concentración y seriedad.
Controlar nerviosismo. Respirar de forma consciente y  a un ritmo natural.
Modular el tono de voz (ni chillona, ni opaca). Hablar a  velocidad moderada (respirar y hacer pausas)
Emplear cíclicamente miradas variadas: al infinito, a las ayudas audiovisuales, al entrecejo o a los ojos del público. Evitar dar la espalda o fijar la mirada en una persona (Ej.: al profesor, al jurado, etc.).  
No emplear muletillas “este…” “bueno” “ommm” “o sea” “ya terminé”. Apoyarse con fichero
Ser preferiblemente natural en las posturas, gestos y modales.
Evite con las manos: ponerlas en los bolsillos, señalar con el índice, colocar los pulgares en el cinturón, cruzar y descruzar los dedos repetidamente, hacerse “sonar” los dedos, frotarse las manos, golpear rítmicamente algo con los dedos o con un bolígrafo, jugar con el cabello.
Evite con el cuerpo: balancearse mientras se está hablando (ni hacia delante-atrás, ni hacia los costados), jugar con la punta del zapato, pararse sobre las puntas de los pies,  quedarse absolutamente quieto ni moverse continuamente, dar muestras de impaciencia.
Usar audiovisuales: Son una ayuda, no es el fin de la exposición. La calidad de la información debe ser prioritaria ante la vistosidad de las láminas. Usar letras grandes. Controlar los colores. Armonía y creatividad. No recargar las láminas. Usar imágenes nítidas.

4. CONCLUSIÓN

La presentación oral no es simplemente leer o decir algunas palabras. Es el producto de un proceso de planificación y concentración. Su éxito depende de un arduo proceso de planificación y preparación en el que prevalece una actitud proactiva y comprometida.
Es una experiencia que favorecen el fortalecimiento de la autoestima y la superación de problemas como la timidez o el miedo escénico.

Es una útil herramienta académica para el intercambio de ideas y enriquecimiento de la cultura general.